En memoria de una querida feligresa
Barcelona 7 de abril 2021
En memoria de nuestra vecina y amiga
Querida Anita:
Me vienen a la memoria, con añoranza, los años en que coincidíamos como feligreses de San Félix. Recuerdo con cuánta alegría e ilusión venías a la parroquia, que hiciste tu segunda casa, y con qué entusiasmo te incorporaste a la catequesis que yo daba los viernes para adultos.
Un día al salir de clase me dijiste: «Adolfo, vengo ilusionada a tus clases porque estoy recordando muchas cosas que ya tenía muy olvidadas y aprendiendo otras nuevas; sin embargo, mi alegría es, sobre todo, porque desde que vengo a la catequesis trato más a Dios, lo estoy conociendo mejor e intimando con Él, pero, ante todo, noto que lo amo con mayor fuerza e intensidad cada día». Siempre que te recuerdo, que es a menudo, te lo aseguro, se hacen presentes en mi memoria esas hermosas e inolvidables palabras tuyas que, te confieso, me hicieron mucho bien porque aumentaron y fortalecieron mi fe.
Pienso que en estos momentos debes sentir una emocionada felicidad al ver a tu familia y amigos, reunidos ante el altar de Dios, para ofrecer el sacrificio vivo y santo de la Santa Misa, por tu eterno descanso. Dios, que es infinitamente justo, pero, sobre todo, clemente, compasivo y misericordioso, habrá sabido premiar, como mereces, tu rectitud de vida y las numerosas buenas obras que fuiste sembrando con generosidad en tu caminar por la vida. Si, querida amiga, seguro estoy de que ya estás gozando, por tus muchos merecimientos, de la visión beatífica de Dios.
Rezo y seguiré rezando por ti siempre, pero, sobre todo, te pido, encarecidamente que tú, que ya estás en la casa del Padre, intercedas por todos nosotros, especialmente por tu familia que con profundo cariño te recordará siempre, y también por nosotros, tus amigos, que guardamos y siempre guardaremos un cariñoso e imborrable recuerdo de ti.
¡Ojalá, querida Anita, sepamos seguir tu ejemplo y vivir con la dignidad y rectitud con que viviste para alcanzar, como tú, el premio eterno!
Hasta la vista, mi inolvidable amiga, ruega por nosotros.
@ Adolfo Villazán
Descargar aquí el escrito en pdf: ADOLFO - En recuerdo de Anita.pdf (66061)